APLICACIONES
Limitar el acceso a ciertas áreas mediante un sistema de identificación de personas (huellas dactilares, tarjetas de proximidad o códigos numéricos), instalando en las puertas aperturas electrónicas.
Existen dos tipos de instalaciones, las centralizadas y las autónomas.
Los sistemas centralizados requieren cablear todos los sistemas de control de los accesos. Pero permiten una configuración centralizada de todos los dispositivos, además de poder conectar a un ordenador central el sistema y configurarlo desde él. Incluso hay extensiones para gobernarlo desde internet.
Los sistemas autónomos funcionan con una instalación sencilla, pero requieren que se configuren los accesos uno a uno.
TIPOS DE CERRADURAS
CERRADURA ELECTROMAGNÉTICA (ABREPUERTAS)
Es el sistema de apertura de puerta que utiliza la mayoría de interfonos. Si la puerta ya dispone de este tipo de cerradura, la adaptación a un sistema de huella dactilar o de proximidad será sencilla, pero no es el sistema más seguro para instalar en la puerta de un domicilio.
CERRADURA MEDIANTE LLAVE Y BOMBÍN
Es el sistema utilizado en la mayoría de casos, por ejemplo en las puertas de entrada a la vivienda. Al ser un sistema de apertura manual, se requiere realizar una adaptación de este sistema a uno automático que pueda ser controlado por un sistema de control de accesos.
CERRADURA DE BOMBÍN MOTORIZADO
Este sistema se utiliza para reemplazar al sistema anterior y así automatizar fácilmente la apertura. Para poder llevar a cabo la substitución es necesario que sean compatibles los dos bombines. Este tipo de sistema funciona con tarjetas de proximidad, sin ser necesaria la llave.
CERRADURA DE ELECTROPISTÓN
Se trata de una cerradura totalmente electrónica, con un sistema similar a la cerradura electromagnética pero con mayor seguridad. Al tratarse de un pistón, tiene mayor resistencia a golpes.
El electropistón puede conectarse a un sistema de lector de huellas o de tarjetas de proximidad.
CERRADURA DE VENTOSA ELECTROMAGNÉTICA
Es una cerradura totalmente electrónica, como el sistema anterior, pero con un sistema de cerradura totalmente diferente. El sistema funciona parecido a un imán: mediante un campo magnético muy fuerte se crea una atracción magnética sobre el metal que se instala en el cerramiento. La fuerza que puede resistir depende del tipo de ventosa instalado, las ventosas mas resistentes llegan a soportar impactos de menos de 300 Kg.
La ventosa puede conectarse a sistemas de lectura de huellas o de tarjetas de proximidad.
